El otro día conseguí, no sin un esfuerzo importante, hacerles los carnés de identidad y el pasaporte a mis hijos, visto que, aunque no son obligatorios hasta los 14 años, cada vez más compañías ponen más pegas para dejar viajar a los niños en avión.
Yo tenía cita el 24, junto con mi marido, porque al mudarnos sí que era obligatorio, y la pedimos por internet dos meses antes, un lunes a las 6:45 de la mañana, porque a las 8h ya no quedan citas.
Cosa increíble, porque no entiendo por qué no te dan cita para más adelante. Pues no. Hoy te dan para el 1 de Abril. Y para ese día hay 20 citas. Así que si no lo haces a primera hora (primera, primerísima) te quedas sin citas y tienes que intentarlo al día siguiente, y al otro, así hasta que tengas suerte. Y eso que los nuestros eran obligatorios. Por teléfono también se puede, pero es aún más imposible si cabe, y no cogen jamás porque están colapsados.
Mientras nosotros no tuviéramos el carné nuevo no podíamos pedir cita para los niños, y veía que los certificados literales de nacimiento que me habían mandado se me iban a caducar.
Así que aquí, la menda, con dos cojones, aprovechando que mis niños no tenían cole, les dejé dormidos a las ocho de la mañana (previo aviso, claro) y me fui a hacer cola a al cuartel de la Guardia Civil que está muy cerca de mi casa. Estuve una hora en la p. calle, con tres grados, a punto de morirme y a las 9 menos cinco un amable funcionario salió para ver si algún incauto sin cita podía ocupar un hueco libre. Tuve suerte y me dieron cita para las nueve y media, así que salí despendolada hacia casa a sacar a los niños de la cama, vestirles e ir rauda y veloz de nuevo al cuartel a las nueve y media o´clock.
Allí nos tuvieron otra hora esperando en la puerta, porque "había mucha gente dentro, y ustedes son de los de sin cita" como si eso fuera un delito federal.
Finalmente nos atendieron, dejando claro que no teníamos cita, y que era una suerte estar allí, y tras 70 € que nos soplaron, mis niños salieron de allí con su DNI y su pasaporte. Y yo salí de allí, con cara de idiota, casi haciendo reverencias a los funcionarios que tuvieron a bien atendernos, y con la terrible sensación de robo manifiesto.
Creo que me voy a ir de vacaciones sólo por usar los malditos documentos oficiales de las narices.
Y yo lo logré, pero mientras estábamos en la puerta aparecieron un matrimonio de ancianitos que preguntaban dónde podían coger cita para renovar (posiblemente por última vez) el DNI a lo que el guardia amable les contestó:
"Pues por teléfono, pero es imposible que les cojan a no ser que tengan mucha suerte y llamen a las ocho en punto de la mañana, o si tienen a alguien que se lo haga por ordenador, pero tiene que ser a las 12 en punto de la noche porque si no se quedan sin citas."
¿? Esa es la cara que se les quedó a los pobres.
Manda huevos que diría alguno.
En fin, espero que dentro de cinco años, que es cuando les caducan los documentos a los niños esté la cosa un poco más organizada porque realmente me pareció tercer mundista.
Ah¡ eso sí , muy amables todos.
Esto es una aventura, y no los de Desafío Extremo que por lo menos saben dónde se meten...
No hay comentarios:
Publicar un comentario